Mi confrontación con la docencia

Entre la docencia y mi profesión

Hola nuevamente compañeros de la Especialidad, pues les cuento que yo de profesión soy Ingeniero Industrial y de Sistemas, egresado en el 2003. Yo siempre busqué estudiar algo diferente a lo que son mi papá y hermano mayor, ellos estudiaron la Normal y Normal Superior para ser maestros y a mi no me apetecía tomar el mismo rumbo, pero véanme hoy en día ya somos 3 maestros en la familia.

Cuando egresé como Ingeniero, me di a la tarea de buscar trabajo, pero ya ven que nuestro país está escaso de oportunidades, entonces surgió en el CECYTEJ No. 6 de Totatiche, una oportunidad de incorporarme como maestro algunas horas, decidí ingresar para tener un sustento mientras encontraba algo más enfocado a mi perfil. Aunque encontraba empleo, estos eran muy mal pagados y fuera de casa. Para enero del 2004 me ofrecieron la mayor cantidad de horas que puede tener un maestro aquí que son 30, esto lo conjugué con un negocio propio y fue así como comencé a echar raíces en mi pueblo.

De todos modos lo de docente ya lo traía de familia, me fue gustando estar frente a grupo, convivir con jóvenes, compartirles toda mi experiencia y ahora no me arrepiento para nada, al contrario ya comencé a estudiar una maestría en Tecnología Educativa y esta especialidad, así que ya estoy enfocado al 100% a la docencia.

Creo que ser profesor es una gran responsabilidad porque en nuestras manos están los jóvenes, quienes son el futuro de cada comunidad, de cada estado, de nuestro México. Aunque suele ser cansado el echo de trabajar no solo las horas que estamos frente a grupo sino otro tanto en casa preparando clase, revisando trabajos, etc. Es muy gratificante ver logrados a nuestros estudiantes y en un futuro encontrártelos o saber de ellos que les está yendo bien, que están estudiando o trabajando pero son personas de bien.

Ser docente en Educación Media Superior ha significado mucho para mi, porque es una etapa complicada de los adolescentes o jóvenes, donde la mayoría aun no sabe o no se ha fijado sus metas en la vida, donde requiere de un gran esfuerzo lograr que los alumnos se interesen por cada tema que vamos viendo, entonces esto se convierte en un reto, y es por ello que diario salgo a dar lo mejor de mi tratando de estimular el aprendizaje y cuando lo logro la satisfacción es aun más grande. Aun me falta mucho para ser un verdadero profesor, sobre todo en el aspecto de manejar tipos de aprendizaje de los muchachos, técnicas de trabajo, etc. Pero del 2003 a la fecha creo que he mejorado bastante.

Mis motivos de satisfacción son: el trabajar como profesor igual que mi papá y hermano, el haber obtenido reconocimientos importantes como profesor de alumnos que han participado en proyectos. El poder tener contacto con los jóvenes que son el futuro de México y poder ser parte de su formación. Pero lo más importante el reconocimiento de mis alumnos pero sobre todo de mis exalumnos que al pasar del tiempo después de haber egresado me los encuentro y me saludan con gusto y a veces me agradecen por todo lo que les pude haber enseñado y no solo en cuestión académica.

Pienso que para siempre encontrar la satisfacción en el trabajo, debemos estar bien con nosotros mismos, dar siempre el 100%, tener una buena actitud y mejorar día con día, con esto, no solo crecemos nosotros sino nuestros alumnos también.

Reconozco que también tengo motivos de insatisfacción y estos son referentes a aquellos alumnos que no he podido lograr convencer de continuar con sus estudios, de que le pongan un poco más de ganas, de motivarlos. También me encuentro insatisfecho en cuanto al salario recibido porque desde que entré siempre he dado lo mejor de mi, me actualizo, me preparo, estoy dentro de actividades académicas como extra académicas, participo en reuniones locales, estatales, doy seguimiento a mis alumnos, y el sueldo desde que entré casi no ha variado. Aquí ganamos menos que un maestro de secundaria, pero mucho menos. Siento que nuestro esfuerzo no se ha visto recompensado y me he dado cuenta que otros maestros en el mismo subsistema que yo han logrado mejores salarios y prestaciones. No por ello dejaré de dar lo mejor de mi.

Miguel Arana